La declaración del Estado de Alarma como consecuencia de la pandemia provocada por el COVID-19 está representando un reto para toda la sociedad, no sólo española sino mundial. En nuestro caso, como empresa española y a la vez italiana, el impacto es doble y nuestra preocupación y responsabilidad es máxima.
Primero con nuestros empleados, para cuya protección estamos empleando todas las medidas necesarias, desde el teletrabajo hasta el seguimiento de las recomendaciones sobre distancias y elementos de protección, con nuestros clientes y proveedores, y en general con la sociedad.
Entendemos que en ese compromiso social se incluye nuestra aportación para contribuir a la protección de los cultivos tan necesarios siempre pero incluso más en estos momentos.
Nuestras actividades de comercialización y fabricación quedan amparadas dentro del concepto de cadena Agroalimentaria. El Ministerio de Agricultura emitió una nota en la que se explicaba que tanto el comercio minorista de insumos agrícolas (los distribuidores, puntos de venta y cooperativas) como los proveedores (fabricantes y comercializadores de abonos, fitosanitarios y otros) podemos seguir desarrollando nuestra actividad.
Los distintos RD publicados consideran igualmente como esencial y por tanto, mientras nos sea posible seguiremos ofreciendo nuestras distintas soluciones para los cultivos, y nuestro departamento técnico comercial seguirá disponible para atender cualquier duda.
Nuestras unidades productivas siguen también activas, como muestra de nuestro compromiso con el sector agrícola y ganadero, y en realidad con toda la sociedad.